Los rollitos vietnamitas (gỏi cuốn) son un símbolo de frescura y equilibrio en la cocina del sudeste asiático. Originarios de Vietnam, estos rollitos en frío combinan ingredientes sencillos con un resultado visual y gustativo sorprendente. Aunque existen muchas variantes, esta versión con pollo es perfecta para quienes buscan una receta saludable y ligera, sin renunciar al sabor.

6-8 rollitos – Tiempo de preparación: 30 minutos

Ingredientes

• 8 hojas de papel de arroz
• 1 pechuga de pollo cocida o a la plancha
• 80g de fideos de arroz finos
• 1 zanahoria
• ½ pepino
• 1 aguacate maduro (opcional)
• 1 taza de hojas frescas de menta
• 1 taza de cilantro fresco
• Hojas de lechuga romana (o cogollo pequeño)
• Brotes de soja (opcional)

Para la salsa de cacahuete

• 2 cucharadas de mantequilla de cacahuete
• 1 cucharada de salsa de soja
• 1 cucharadita de azúcar moreno
• Zumo de ½ lima
• 2 cucharadas de agua caliente
• Salsa Sriracha al gusto (opcional)

Preparación

Cocemos los fideos de arroz siguiendo las instrucciones del paquete. Una vez listos, los pasamos por agua fría y los dejamos escurrir. Cortamos la pechuga de pollo en tiras finas (si no está cocida, podemos hacerla a la plancha con una pizca de sal y pimienta). Pelamos la zanahoria y el pepino y los cortamos en tiras alargadas. Si usamos aguacate, lo laminamos con cuidado. Lavamos las hojas de menta, cilantro y lechuga, que servirán de base vegetal.

Para hidratar el papel de arroz, usamos un cuenco amplio con agua templada. Sumergimos cada hoja unos segundos hasta que esté flexible, la sacamos y la colocamos sobre un paño húmedo.

Montar los rollitos es una tarea sencilla si se hace con calma: en el centro de la hoja de arroz colocamos una hoja de lechuga, unos pocos fideos de arroz, tiras de pollo, zanahoria, pepino y unas hojas de menta y cilantro. Plegamos primero los lados hacia dentro, después la parte inferior hacia arriba, y finalmente enrollamos firmemente hasta cerrar el rollito.

Para la salsa, mezclamos todos los ingredientes en un cuenco hasta obtener una crema suave. Ajustamos la textura añadiendo un poco más de agua si lo necesitamos.

Servimos los rollitos acompañados de la salsa de cacahuete y decoramos con más hojas frescas. Son ideales como entrante, cena ligera o incluso para llevar en un tupper a un picnic.