Las semillas de hinojo son muy utilizadas en la cocina india, especialmente tras las comidas, por sus propiedades digestivas y su frescor. Su sabor recuerda al anís, con una nota dulce y cálida que sorprende en forma de helado. Esta receta, suave y aromática, es una forma deliciosa de cerrar cualquier comida con elegancia y originalidad.

Tiempo total: 35 min + congelación
Rinde: 6–8 porciones

Ingredientes

• 2 cucharadas de semillas de hinojo
• 300 ml de leche entera
• 300 ml de nata para cocinar
• 1 pizca de sal
• 5 yemas de huevo (puedes congelar las claras para otra preparación)
• 150 g de azúcar extrafino

Preparación

1. Infusión aromática
   Machaca ligeramente las semillas de hinojo en un mortero. Vierte la leche en una cazuela, añade el hinojo machacado y la sal. Calienta a fuego medio-bajo hasta que aparezcan burbujas en los bordes (sin llegar a hervir). Retira del fuego, añade la nata y deja infusionar tapado durante 15-20 minutos.
2. Base cremosa
   Bate las yemas con el azúcar hasta obtener una mezcla pálida y espumosa. Añádela muy lentamente a la infusión, removiendo constantemente. Vuelve a poner la mezcla al fuego muy suave, sin dejar de remover, hasta que espese ligeramente como unas natillas.
3. Enfriado y colado
   Pasa la mezcla a un cuenco y deja que se enfríe. Después, cuélala con un colador fino o una tela de muselina para eliminar las semillas. Refrigérala al menos 2 horas.
4. Congelación
   • Con heladera: Bate hasta que adquiera textura de helado (unos 20 minutos).
   • Sin heladera: Vierte en un recipiente bajo, congela 45 minutos, bate vigorosamente y repite cada 30 minutos durante 2–3 horas hasta que quede cremoso.

Sugerencia

Sírvelo solo o con unas hojas de menta fresca. Ideal para acompañar postres con frutas tropicales o como digestivo tras una comida abundante.