Las samosas son una delicia de la cocina india que han conquistado paladares en todo el mundo gracias a su versatilidad y sabor. Hoy te presentamos una versión innovadora y colorida: samosas de remolacha y queso feta. Esta receta combina la dulzura terrosa de la remolacha con la cremosidad del queso feta y una mezcla aromática de especias, envuelta en una crujiente masa filo. Perfectas como aperitivo, para una fiesta o como un tentempié saludable, estas samosas sorprenderán a tus invitados con su vibrante color y delicioso sabor. ¡Anímate a prepararlas y disfruta de un bocado exótico y nutritivo!

18-24 samosas 1h 30min

Ingredientes

400g de remolachas frescas
200g de queso feta
4 cebolletas picadas finamente
30g de cilantro fresco picado finamente
4 dientes de ajo machacados
1 paquete de masa filo
100g de mantequilla sin sal
1 cucharada de semillas de comino
1 cucharada de especias Gram Masala
1 cucharadita de sal
opcional: 1 guindilla verde fresca finamente picada

Preparación

Preparación de las Remolachas:

Comenzamos cociendo las remolachas hasta que estén tiernas, lo que suele tardar aproximadamente 1 hora. También podemos utilizar remolachas ya cocidas. Una vez cocidas, las colocamos bajo el grifo con agua fría, las pelamos y las trituramos con un pasapurés, un tenedor o una licuadora.

Preparación del Relleno: En una sartén, añadimos el puré de remolacha y lo calentamos, salteándolo unos 5 minutos hasta que no quede demasiado húmedo, para conseguir unas samosas crujientes. Apagamos el fuego y reservamos el puré en un cuenco grande.

Cortamos el queso feta en taquitos de 1 cm y lo añadimos al puré junto con las cebolletas picadas, el cilantro, el ajo, las semillas de comino (previamente tostadas), el Gram Masala, la sal y la guindilla verde picada. Mezclamos bien y ajustamos los condimentos al gusto si fuera necesario.

Montaje de las Samosas: Desenrollamos una lámina de masa filo con cuidado sobre una superficie plana, pincelamos ligeramente con la mantequilla fundida y la cubrimos con otra lámina de masa filo. Cortamos las láminas en horizontal, en tres partes de unos 10×25 cm cada una.

En un lado de la tira de la masa filo, enrollamos hasta formar un cono, introducimos una cucharada colmada de relleno y doblamos el lado abierto hacia el resto de la masa para cubrirlo y sellarlo. Se debe obtener una forma triangular. Seguimos doblando la masa alrededor del cono hasta llegar al final de la tira.

Pincelamos el borde con mantequilla y sellamos con los dedos. Repetimos el proceso con el resto de tiras, rellenándolas y preparándolas en una fuente o un plato grande.

Cocción: Precalentamos el horno a 200ºC. Pincelamos las samosas por las dos caras con mantequilla (opcional: podemos añadirles semillas de sésamo antes de hornearlas) y las colocamos sobre una bandeja para horno con papel vegetal o engrasada. Horneamos las samosas durante 20-25 minutos o hasta que queden bien doradas y las servimos al gusto.

Opción Tradicional: También podemos freír las samosas, que es la manera tradicional. Debemos calentar a fuego alto una abundante cantidad de aceite vegetal y freír las samosas hasta que queden doradas.

Almacenamiento: Si preferimos no cocinar las samosas en ese momento, se pueden congelar una vez montadas y freírlas u hornearlas en cualquier ocasión.

Disfruta de estas samosas de remolacha y queso feta, una mezcla de texturas y sabores que te llevará en un viaje culinario inolvidable.