La tarta de coco y queso es una exquisitez que combina la suavidad y cremosidad del queso con el exótico sabor del coco. Esta irresistible combinación de sabores tropicales y texturas sedosas la convierte en un postre que deleitará a todos los amantes del dulce. ¡Prepárate para disfrutar de un viaje de sabor con cada bocado!
8 Porciones 20min más 2h de enfriamiento
INGREDIENTES
- 180g de galletas integrales
- 60g de mantequilla derretida
- 400ml de leche de coco
- 200ml de nata para montar
- 500g de crema de queso
- 100ml de leche entera tibia
- 160g de azúcar
- 2 sobres de cuajada en polvo
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Opcional: coco rallado, mermelada, polvo de galleta o miel para decorar
PREPARACIÓN
En primer lugar elaboramos la base, trituramos las galletas hasta que parezcan polvo, también podemos probar con una base de galletas de vainilla o de chocolate en lugar de galletas integrales para variar el sabor y la textura de la base. Las mezclamos con la mantequilla derretida formando una pasta. Preparamos un molde para la tarta y extendemos la pasta de las galletas y la mantequilla cubriendo toda la base. Una vez esparcida guardamos en la nevera.
En una olla pequeña o en un cazo, ponemos a fuego medio-bajo la nata, la crema de queso, la leche de coco y el azúcar, mientras se derrite la crema de queso, disolvemos los dos sobres de cuajada en polvo en la leche tibia y añadimos a la mezcla anterior. Vamos removiendo hasta que la mezcla rompa a hervir, entonces, retiramos del fuego y dejamos enfriar 5min.
Vertemos la mezcla sobre la base de galleta que habíamos preparado en el molde, dejamos reposar la tarta hasta que esté a temperatura ambiente y metemos en la nevera un mínimo de 4 horas antes de consumir, aunque es preferible dejarla reposar toda una noche.
Finalmente, podemos decorar con coco rallado, miel o más polvo de galleta según nos guste o puedes añadir rodajas de frutas frescas como fresas, kiwi o mango en la parte superior de la tarta para un toque de frescura y color. También puedes extender una capa delgada de mermelada de frutas sobre la superficie de la tarta antes de servirla para un contraste dulce y ácido. Para que se conserve bien guardar la tarta siempre en la nevera tapada.
